Si si, Aznar mirará mejor, pero Rajoy se ha pillado el mejor sitio, porque las vistas de la sierra qu e hay en la planta 29 de este hotel merecen la pena, aunque tengas a Aznar delante.
Muchos años después, frente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía había de recordar aquella tarde remota en que su padre lo llevó a conocer el hielo...